Café ¿bueno o malo?

CAFÉ, ¿BUENO O MALO?

- SIEMPRE CON MODERACIÓN -

y si compras el grano y lo mueles? disfruta del aroma!

y si compras el grano y lo mueles? disfruta del aroma!


 El café es la bebida aromática más consumida del mundo y la segunda materia más comercializada tras el petróleo. Hay muchos estudios relacionados con él que generan polémica, pero voy a tratar de sintetizar y razonar la información.

La respuesta más consensuada por los científicos es que tomar cantidades moderadas, de 1 a 3 tazas diarias, encaja con un estilo de vida saludable. Exceder dichos límites nos haría entrar en un consumo que ya podría considerarse perjudicial.

La mejor manera de tomarlo es solo o con bebida vegetal, evitando todo lo posible la leche de vaca, ya que genera aminas biógenas que, mezcladas con los nitratos y nitritos presentes en otros alimentos, pueden dar lugar a nitrosaminas, sustancias claramente cancerígenas (Discovery Salud).

Otro de los factores a tener en cuenta es que el café debe ser NATURAL (no mezcla ni torrefacto por la cantidad de toxinas presentes) y si es ecológico, mejor.

Teniendo en cuenta lo que nos aporta, podemos decir que el café es poco nutritivo, pero contiene potasio, magnesio, calcio, cromo y manganeso, vitamina E y B3 más cafeína.  Las bebidas cafeinadas a modo de refresco no se pueden comparar, ya que sus “nutrientes” varían en función del producto y en muchos casos resultan deficientes si consideramos su valor nutricional y lo que nuestro sistema digestivo debe aportar para metabolizarlos. 

Por supuesto, uno de los motivos por lo que se consume café es por su aporte de cafeína, cuyas funciones pasamos a enumerar:

- estimula el sistema nervioso central;

- aumenta el estado de vigilia;

- acelera el ritmo cardíaco;

- produce vasodilatación periférica y vasoconstricción craneal, de ahí que lo usen en medicamentos para las migrañas; 

- aumenta la secreción gástrica y la diuresis;

Tomar de 2 a 3 tazas al día ayuda a tonificar el organismo, a perder peso y favorece las funciones digestivas e intelectuales, combate el estreñimiento y estimula la diuresis, como decíamos, pero en EXCESO, como todo, genera irritabilidad, acidez estomacal, náuseas, vómitos, úlceras, cistitis, tensión alta, temblores musculares, interfiere en el apetito y puede causar dolor de cabeza. En definitiva, puede llegar a desequilibrar nuestro organismo.

Quien deja el café bruscamente puede experimentar cansancio, irritabilidad, falta de concentración o dolor de cabeza, por lo que siempre recomiendo rebajar su consumo progresivamente si es posible.

El efecto en el organismo después de la toma de café tiene una duración de 3 a 7 horas y de 6 a 10 horas en mujeres que toman anticonceptivos o durante el embarazo y la lactancia. Por ello, siempre se recomienda evitarlo en el embarazo y mejor no tomarlo más tarde de las 15:00 h, para evitar trastornos del sueño.

Por tanto, es importante saber que el café no es necesario en una alimentación equilibrada, pero si quieres tomarlo, que no sean más de tres tazas al día (evitándolo durante el embarazo y lactancia) y no lo mezcles con leche de vaca.

He de decir que estas recomendaciones son para personas sanas, por lo que necesitaríamos personalizar las pautas a seguir en todos aquellos casos de personas que estén tomando medicación o tengan problemas de salud de diversa índole.

Como alternativas al café para rebajar los índices de cafeína que se ingieren, puede tomarse té blanco, verde, rojo o negro, pues contiene teína y es estimulante, aunque en menor intensidad.

Como siempre, muchas gracias por leer y tener en cuenta las pautas que voy compartiendo, cuya finalidad no es otra que contribuir a mejorar nuestro estado de salud.

Lucía González